De las cientos de opciones de compra para las fiestas de fin de año, hay varias que ofrecen más que un atractivo producto. Son regalos que además de alegrar a quien lo recibe, activan una cadena de solidaridad que llega a fabricantes, comerciantes, familias y comunidades.
Diseño sustentable e inclusión social
Proyecto Importa, una empresa B, es una iniciativa de dos estudiantes de Diseño de la Universidad Diego Portales para el desarrollo de productos sustentables con materiales reciclados fabricados por jóvenes internos del Sename o en reclusión penitenciaria.
Hoy trabajan con un equipo multidisciplinario que se ocupa, entre otras tareas, de atender y capacitar a los usuarios a través de talleres y cursos, de los que han surgido colecciones de joyas, mobiliario y accesorios hechos de materiales como papel couchè o desechos textiles. Los materiales son donados por empresas colaboradoras y se pueden comprar en Homy, de la cadena Sodimac, o en el Centro Cultural Palacio de la Moneda.
Lo más importante es que esos espacios de reclusión se están convirtiendo, a través de las acciones de este proyecto, en una oportunidad de trabajo y modelo de reinserción social que puede ser replicado en otras instituciones.
Los ex presos de la soledad y la pena
A partir de un voluntariado en las residencias del Hogar de Cristo, Maité Zubia formó un taller de carpintería que hoy es Expreso, un modelo de negocio de artesanos en situación de calle que trabajan con maderas de desecho. Esos “ex presos de la soledad, el alcoholismo y el abandono” tallan día a día madera reciclada para producir tablas de cocina, puzles, cruces de madera, mandalas, que están a la venta en la tienda EÑE. Todas las ganancias se reinvierten en el mismo taller y se reparten entre los artesanos. Para saber más de los productos, se puede contactar a Maite al teléfono 569 66493334.
Comercio Justo y rescate del patrimonio cultural
La Fundación Artesanías de Chile es una extensa red de casi 2000 talentosos artesanos chilenos, que viven en comunidades tradicionales, saben de su oficio y viven en situación de vulnerabilidad, lo que les ha impedido acceder a redes de comercialización de sus productos.
De esta manera y adhiriéndose a los principios del comercio justo, la Fundación compra todas las piezas de cerámica, madera, metales, piedra, textiles o paja y las comercia retribuyendo al artesano con el total de las ganancias.
Los productos, adornos y artefactos en cerámica y madera, cestas y canastos, ollas y adornos en cobre, joyas, alfombras, chales, ponchos y bufandas, entre muchos otros típicos de Chile, se encuentran en las tiendas en el Centro Cultural Palacio de la Moneda y el Centro Artesanal Los Domínicos en Santiago y en sus locales en Valdivia, Puerto Varas y San Pedro de Atacama.
Manos de mi Tierra
Manos de mi Tierra es una iniciativa público-privada que apoya la comercialización de los productos de microemprendedores chilenos, para favorecer su desarrollo y contribuir a su bienestar económico.
Al igual que la Fundación Artesanías de Chile, se trata de un proyecto social ajustado a los estándares del Comercio Justo, asegurando que el productor reciba un pago justo, tenga condiciones de trabajo dignas y adecuadas, se respeten sus tradiciones culturales y el medio ambiente.
Los productos, creaciones artesanales 100% nacionales, usando técnicas como la madera, vidrio y telas, se exhiben en Homy, de las tiendas Sodimac, que forma parte de la alianza, junto al FOSIS y la organización Comparte.
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