El lanzamiento de Pope2You.net (además de aplicaciones para iPhone y de una cuenta en Facebook) que ha realizado el Papa Benedicto XVI ha sido noticia hoy en varios medios y en sitios especializados en la web social.
La noticia tiene gran relevancia no tanto por ser fruto de la intención del Vaticano de utilizar esas herramientas para acercarse a los jóvenes, sino sobre todo por estar enmarcada por la reflexión que ha motivado la proximidad de la 43ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que se celebrará este domingo 24 de mayo, razón por la cual se ha difundido el mensaje del Papa titulado: “Nuevas tecnologías, nuevas relaciones. Promover una cultura de respeto, de diálogo, de amistad”.
Para nosotros, en Donare, el contenido de este mensaje ha sido de lo más inspirador, porque además es lo que fundamenta el interés de la Iglesia por usar los medios sociales. En la misma línea, nos hemos sentido en plena sintonía con el llamado del Papa Benedicto XVI a utilizar estos medios para construir una sociedad más justa y solidaria. “Quisiera compartir con ellos (con la llamada generación digital) algunas ideas sobre el extraordinario potencial de las nuevas tecnologías, cuando se usan para favorecer la comprensión y la solidaridad humana”, dice el Papa en su mensaje. Y continúa: “Estas tecnologías son un verdadero don para la humanidad y por ello debemos hacer que sus ventajas se pongan al servicio de todos los seres humanos y de todas las comunidades, sobre todo de los más necesitados y vulnerables”.
Esta semana, en la que hemos empezado a contactarnos con instituciones a las que creemos que podría interesarles de manera especial ser parte del directorio de Donare, hemos sido testigos de las diferencias en el acceso y el uso de Internet y los medios sociales que existen entre las organizaciones sin fines de lucro. En relación con ello, leemos en el mensaje papal: “Sería un grave daño para el futuro de la humanidad si los nuevos instrumentos de comunicación, que permiten compartir saber e información de modo más veloz y eficaz, no fueran accesibles a quienes ya están social y económicamente marginados, o si contribuyeran tan sólo a acrecentar la distancia que separa a los pobres de las nuevas redes que se desarrollan al servicio de la información y la socialización humana”.
De ahí el deber que tenemos de facilitar el acceso de los más necesitados al mundo de oportunidades que Internet puede ofrecerles. En ese sentido, nos identificamos con las palabras del Santo Padre, acerca de que “es alentador ver surgir nuevas redes digitales que tratan de promover la solidaridad humana, la paz y la justicia, los derechos humanos, el respeto por la vida y el bien de la creación”, y de que “estas redes pueden facilitar formas de cooperación entre pueblos de diversos contextos geográficos y culturales, permitiéndoles profundizar en la humanidad común y en el sentido de corresponsabilidad para el bien de todos”.
El mensaje completo puede leerse aquí.